Teniendo en cuenta el clima, la influencia de los vientos alisios y la profunda diferenciación de las vertientes, podemos distinguir, especialmente en las islas más montañosas, la zona norte, húmeda y de gran riqueza agrícola, y la zona sur, seca, árida y pobre. Si bien, existen áreas que han sido transformadas en regadío con excelente rendimiento.

Asimismo, la altura es una referente constante: zona costera o tierras bajas (entre 0 y 300 metros), de cultivos subtropicales o erial. Zona media o medianías (entre 300 y 700 metros de altitud), dedicadas a la agricultura de subsistencia, de tipo mediterráneo. Y por último, la zona alta, compuesta por bosques, pastizales y escasa agricultura.

Los cultivos de regadío, dirigidos principalmente a la exportación, ocupan las zonas bajas de las Islas. (DM)

La finalidad del cultivo también está en relación con la altitud, es decir, si el cultivo va dirigido principalmente a la subsistencia o a la actividad comercial. Los primeros están situados en las zonas de medianías y, generalmente, de secano, tales como, cereales, papas y árboles frutales. Los segundos, en zonas bajas, de regadío, tales como plátanos, tomates, frutos tropicales y flores.

Para determinar el orden de importancia de los cultivos, hay que atender a tres variables: la superficie que ocupa, su producción y el valor de esa producción en el mercado. Siguiendo estas variables, podemos señalar, por orden de mayor a menor importancia, los siguientes cultivos: el plátano y el tomate, cultivos por excelencia, las flores y plantas ornamentales; el pepino, que ha maximizado su rentabilidad; el pimiento y las judías, que disponiendo de una menor superficie de cultivo tiene una alta rentabilidad en su producción; y, por último, podemos nombrar a la papa, sobre todo por su importancia en la economía familiar. En cuanto a la vid, hay que indicar que es el cultivo al cual se dedica mayor superficie, y cuya rentabilidad ha mejorado en los últimos años, gracias a la implicación de las Administraciones en su promoción y, a la creación de las denominaciones de origen.

Superficie por hectáreas de los principales cultivos en Canarias (2007)