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  1. MUNDO Y VIDA DE LOS ANTIGUOS CANARIOS    
 
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17. ORGANIZACIÓN POLÍTICA



Es probable que todas las islas comenzaran con distintas tribus y clanes, pero que a través del tiempo se fueron imponiendo, con la lucha, una tribu sobre otra, dando lugar a la monarquía. La monarquía era hereditaria y se hallaba asistida por varios consejeros. El dominio general conseguido por un sólo rey en alguna isla, era con el tiempo repartido entre sus herederos, dando lugar a diferentes reinos.

LOS REINOS

En tiempo de la conquista, en Lanzarote y en El Hierro sólo existía un reino. En Fuerteventura, dos. En La Gomera, en un principio uno y luego, cuatro. En Tenerife, nueve. En Gran Canaria, diez. En La Palma, once. Si nos fijamos en el número de reinos por cada isla y lo comparamos con la menor o mayor riqueza de cada una de ella, encontraremos que existe cierta relación entre «riqueza y división en reinos». En efecto, Lanzarote, El Hierro y Fuerteventura son las más pobres y también las menos divididas. La Gomera supone un término medio en ambos aspectos. Por otra parte está Tenerife, Gran Canaria y La Palma, que son las más divididas y también las más ricas.

LAS JERARQUÍAS

El rey gobernaba en cada reino asesorado por sus consejeros. En Tene­rife al rey se le designa con el nombre de Mencey. Es una palabra que tiene mucha semejanza con la palabra líbica Mencad, traducida al latín por «Imperator». En Gran Canaria, el nombre dado es el de Guanarteme, que quiere decir «El hijo de Artemi» (Guan, «este de»; Arteme, «Artemi»).

Junto al rey existían consejeros o capitanes. En Gran Canaria eran seis los que en cada reino asesoraban al guanarteme, y se les denominaba Guaires. El nombre de los capitanes en Tenerife era Sigoñe. Existían, así mismo, sacerdotes y jueces en Gran Canaria y se les llamaba a los primeros faicanes y a los segundos, fayacanes.

EL SABOR

Por este nombre se denominaba al Consejo militar en la isla de Gran Canaria. Aquí se deliberaban cuestiones relacionadas con pastos, problemas creados por los súbditos, conflictos entre un reino y otro, las situaciones de peligro originadas por gentes que recalaban en las costas, etc.

DISTINCIÓN REAL

De Tenerife y Gran Canaria sabemos que cuando el mencey o guanarteme salía, le acompañaba una escolta, precedida por un capitán con la añepa en alto. A su presencia se arrodillaban todos besándole el tamarco y limpiándole los pies, en señal de veneración. La salida más importante de los menceyes de Tenerife era cuando se trasladaban con motivo del verano, a Las Cañadas del Teide. Aquí tenían su otra residencia.

JURAMENTO

«Agoñe Yacoron Yñatzahaña Chacoñamet» («Juro por el hueso de aquél, que me hice grande»)

Éstas eran las palabras rituales con que juraba el nuevo mencey en Tenerife, besando un hueso de un antepasado que conservaban forrado en piel. Luego se lo ponía a la cabeza y después se lo daba a besar a los ancianos y nobles que volvían a repetir la misma fórmula ritual: «Juro por el hueso de aquél, que te hiciste grande».

Esta ceremonia se celebraba en el tagoror, enramado de flores y hojas de palmeras. Allí acudía todo el pueblo. El pariente más anciano del nuevo monarca era quien iniciaba el rito mostrándole el hueso de su antepasado. Concluida la ceremonia, se celebraba un convite seguido de danzas y concursos deportivos.

SUCESIÓN

En cuanto al orden de sucesión en Tenerife, Espinosa señala: «El modo que de suceder tenían era que la sucesión de los reyes no era de padres a hijos, sino que si el rey que a la sazón reinaba tenía hermanos, aunque tuviese hijos, no heredaban los hijos, sino el hermano mayor». En La Gomera parece que se seguía una sucesión matrilineal, es decir, al rey le sucedían los hijos de su hermana. Ello puede ser debido a la influencia social de la mujer y al hecho de que al no haber un matrimonio constituido, se puede estar seguro de los hijos de la madre, pero no así del padre.

En algunos casos vemos que la sucesión no es hereditaria, tal como conocemos con Doramas en Gran Canaria, que es proclamado guanarteme a la muerte del rey de Telde, aunque posiblemente, más que un guanarteme, desempeñaría el papel de caudillo en el estado de guerra que estaba su país contra los conquistadores españoles.

TAGOROR. La asamblea se realiza en el Tagoror, estructura de forma circular con grandes piedras.

LAS LEYES

En cada isla hay distintas maneras de administrar la justicia.

En Fuerteventura se llevaba al homicida a la orilla del mar y se le ponía la cabeza sobre una laja, machacándola con otra piedra redonda hasta soltar los sesos. Toda la familia del delincuente quedaba infame en el país. Este delito era especialmente condenado cuando había sido realizado a traición, por ejemplo, entrando por el techo o por la parte trasera de la casa.

En El Hierro, se saca un ojo al ladrón en el primer hurto; por el segundo, el otro.

En La Palma, no era mal visto el robo, se consideraba como una habilidad.

En Gran Canaria, se condenaban el homicidio y el robo. Existían cárceles públicas y se condenaba a muerte al que mataba.

En Tenerife, aunque existía una justicia para condenar el robo, el asesinato y la falta de respeto a una mujer, no existía la pena de muerte. Había un auténtico horror a la sangre, hasta tal punto que el castigo para los españoles apresados era ponerlos como carniceros de cabras, en señal de desprecio. Al homicida se le solía castigar privándole de su ganado, para indemnizar a los familiares de la víctima, y desterrándolo. Por otros delitos, se castiga en el mismo tagoror, en presencia del mencey. Se tendía en el suelo el delincuente y el verdugo le propinaba un cierto número de golpes con el bastón del propio mencey, como señal de poder real. Luego, el mencey daba orden de que le curasen las heridas. La legislación era severa por la falta de respeto o decoro hacia la mujer. Si se encontraba una mujer en el camino o en otro lugar solitario, estaba completamente prohibido abordarla, hablar con ella o mirarla descaradamente sin que ella lo permitiera.

ESCOMBRERA EN EL NORTE DE TENERIFE. Similar a las Pirámides de Güímar. Algunos les han atribuido a estas últimas un origen guanche, pero resulta dudoso. De cualquier forma, en la actualidad, forman parte de un parque temático impulsado por Thor Heyerdahl.
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